"Bancos" neomodernos para culos estrechos

Nunca entendere quién ni porqué tuvo la osadía de crear estas rejillas donde se supone que por algún breve intervalo de tiempo tienen que descansar nuestras posaderas. Son incómodas, frías, impersonales y estrechas, invitan al viajero a quedarse de pie, no sea que ciertas partes nobles de nuestra anatomía adquieran una fachada de cebra. Yo debo ser esta mañana muy valiente o debo estar muy cansado, pero las he "disfrutado" unos minutitos haciendo eso si, ciertos equilibrios dignos del mejor funambulista. Bueno, vamos al bus, no se que me espera pero seguro que más amplio y cómodo, pero no oa preocupéis, bancos neomodernos para culos estrechos, os llevo en mi cabeza, corazón y glúteos al menos durante todo el día de hoy...